julio 25, 2006

El peso político de Hugo Chávez en Argentina

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, es un asiduo visitante de Argentina. Se le conceden espacios de poder, actúa deliberadamente y proyecta una imagen contraproducente para los intereses de Argentina.

Hugo Chávez encabezó en Argentina los eventos paralelos a la Cumbre de las Américas, celebrada en Mar del Plata en noviembre de 2005 , y a la reciente reunión del MERCOSUR en Córdoba, bajo la modalidad de la "cumbre de los pueblos”. Durante la última convocatoria, en la que el líder venezolano introdujo su propia custodia armada y solventó los gastos organizativos del encuentro, acaparó la atención de los medios acompañado de la presencia emblemática de Fidel Castro. Centralizó su tono discursivo ya conocido, jugó con la rima “ALCA AL – CARAJO”, exclamó mensajes adversos al sistema capitalista, rememoró al Cordobazo, y citó al sistema totalitario de Cuba como un modelo de país a seguir por Latinoamérica.

El presidente venezolano adoptó el territorio argentino como una de sus plataformas de lanzamiento para concretar su plan imperialista de convertir a Venezuela en la voz cantante del continente latinoamericano. Ya obtuvo un importante logro con su reciente incorporación como país miembro del MERCOSUR, desde donde puso de manifiesto que su pertenencia al grupo persigue fines geopolíticos, contrariando los principios fundacionales del bloque.

En términos domésticos, el avance de Chávez se asemeja a la figura del invitado que busca avasallar los límites normales de la hospitalidad de una casa y recorre los ambientes, mueve los objetos de su lugar, abre la heladera, se pone la bata del jefe de familia y pretende la llave de acceso a la puerta principal.

Solamente Cuba y Bolivia abren sus puertas a Chávez de un modo similar. Pero la característica sustancial de estas dos naciones es que sus respectivas alineaciones pueden hoy verse favorecidas con el aval de Venezuela, mientras que, para Argentina, este nivel de asimilación con el líder bolivariano se contradice con la necesidad de establecer lazos fructíferos con otros países de Latinoamérica y restantes regiones del mundo que no comparten la avanzada de los petrodólares venezolanos.

El peso político de Chávez en la región va en aumento. Los temas de la energía y la deuda internacional de los países latinoamericanos se constituyeron en los principales componentes discursivos de la revolución bolivariana, de corte anticapitalista. Con ese tenor, ejerció una significativa influencia para que Argentina cancelara en forma anticipada su deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), aportando dólares a cambio de la compra de bonos. Ahora, aspira a jugar un papel protagónico en el urgente abastecimiento energético que requiere Kirchner para incentivar la producción nacional.

Su nivel de intromisión llegó a generar la sospecha de que en abril de este año solicitó la designación de Alicia Castro como embajadora en Venezuela. Este hecho, de ser cierto, significaría una injerencia en la política externa argentina.

La penetración chavista, además de contar con la anuencia del presidente Néstor Kirchner, parece ser que no le quita demasiado el sueño a ningún sector de la política argentina, cuya pasividad queda demostrada a partir del accionar del gobierno que va situando deliberadamente al país en un puesto subordinado a la revolución bolivariana.

Venezuela, de igual modo que Brasil, Colombia y Chile llevan a cabo progresivos programas de compra de armamento, pero el presidente de Argentina continúa con su plan férreo de denostar y minimizar la significancia de las Fuerzas Armadas. Kirchner siempre usufructuó la última dictadura militar como un elemento servible para su interés discursivo en el ámbito de la política partidaria, tal vez sin advertir que su obsesión conduce al propio debilitamiento de su autoridad y el liderazgo que debería ejercer en su rol de Comandante en Jefe.

Mientras tanto, el líder petrolero Chávez hace explícita su simpatía con Irán y exhibe abiertamente su interés por alcanzar un poderío bélico significativo en la región. Al mismo tiempo, lanza una propuesta al bloque del MERCOSUR para que se instaure una fuerza militar sudamericana. De concretarse, también bajo este aspecto, Argentina se verá atrapada por el soñado imperio del líder bolivariano.




Notas relacionadas:
Habanos en la cumbre Mercosur


VOLVER A LA PÁGINA PRINCIPAL

No hay comentarios.: