El 5 de abril, los docentes neuquinos bloquearon la Ruta Nacional 22, a la altura de Arroyitos, cortando el acceso hacia los centros turísticos de la región. El gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, dio la orden de desalojar a los manifestantes con la unidad antimotines. Durante el operativo, el sargento primero Darío Poblete disparó una granada de gas, que tiene la fuerza suficiente para llegar a 80 metros, contra un vehículo que estaba sólo a 2 de distancia e hirió de muerte al docente Carlos Fuentealba.
Primeras consideraciones del ministro Filmus: “El fusilamiento de Fuentealba es de los hechos más graves que debió enfrentar la sociedad argentina en estos tiempos de democracia”
La calificación enérgica del ministro no pasó a ser más que una frase hecha, disuelta en el desentendimiento asumido por el gobierno nacional.
Primeras conclusiones del ministro Filmus: “Desborda lo educativo”. “No tenemos nada que ver”
A tres meses de las elecciones en la Ciudad, Filmus está más preocupado por su candidatura como jefe de Gobierno que por su rol de ministro. Afirmó que la situación en la provincia del gobernador Sobisch “desborda lo educativo” y declaró que “los docentes y la gente de Neuquén saben a quién tienen que discutir o quiénes son los responsables”. Subrayó: “no tenemos nada que ver"
Resolución final del ministro Filmus: "Que las escuelas de todo el país dediquen un espacio a la reflexión de lo que ha sucedido en Neuquén”
La única resolución del ministerio de Educación consistió en cargar el peso del conflicto en los propios docentes y alumnos: "que las escuelas de todo el país dediquen un espacio a la reflexión de lo que ha sucedido en Neuquén, para que el dolor y el repudio por este hecho sean un motivo de aprendizaje, de formación ciudadana y de fortalecimiento de la conciencia colectiva acerca de las prácticas de la democracia".
El ministro del Interior también se desentiende "No me he comunicado con Neuquén y no he hablado con el gobernador.¿Para qué iba hacerlo?"
El ministro del Interior, Aníbal Fernández, justificó el no haberse comunicado con funcionarios de la provincia ni con el propio gobernador. “¿Para qué iba hacerlo?", se pregunto a sí mismo, “si su propio secretario de Seguridad (Raúl Pascuarelli) ha salido a reivindicar la represión". No descartó la posibilidad de enviar refuerzos de seguridad a la provincia si se produjera “un delito federal o por pedido expreso de la justicia”, y aclaró: “No tuvimos ninguna situación en Neuquén ni hemos tenido un pedido especifico del gobierno".
El presidente Néstor Kirchner, desde su residencia, en El Calafate, manifestó su "profundo dolor, pena y pesar" por la muerte del docente neuquino
Lejos de la Casa Rosada, recluido en su residencia en El Calafate, el presidente se limitó a manifestar su "profundo dolor, pena y pesar" por la muerte del docente neuquino y repudió "la violencia y represión como forma para enfrentar las protestas". Condenó el accionar dispuesto por el gobernador Sobisch en contraposición con la política de "persuasión y disuasión" seguida por el Gobierno nacional.
Luego de retornar de sus vacaciones, el presidente volvió a referirse a la represión a los docentes neuquinos: “Siempre voy a apelar a la convivencia, prefiero que la gente se pueda expresar"
Sin mencionar directamente al gobernador Sobisch,el presidente expresó: “En democracia existen conflictos y tiene que ver con un país que crece. Sin embargo, algunos quieren recrear la Doctrina de la Seguridad nacional bis, esa filosofía de la dictadura que reprimía los conflictos y los hacía desaparecer”.
El desenlace de la represión ordenada por el gobernador Sobisch puede repetirse en otras regiones, en especial, Santa Cruz. En la provincia del presidente el conflicto es aún más antiguo y complejo que en Neuquén. Reina una situación crítica con reclamos y manifestaciones contra el gobernador y la propia figura de Néstor Kirchner, quien hasta el momento solo atinó a expresar:“Siempre voy a apelar a la convivencia, prefiero que la gente se pueda expresar"
Santa Cruz sitiada por tropas enviadas por el gobierno central. El ministro Aníbal Fernández advierte: "si esas cosas se van a producir, lo mejor es prevenir y no ir atrás de los conflictos", por lo que "la Gendarmería está en la provincia a pedido de su gobernador", Carlos Sancho
En Santa Cruz se teme que se pueda producir una sublevación de la policía a raíz del descontento por los salarios provinciales y el crimen aún no esclarecido del suboficial Jorge Sayago, quien fuera asesinado en febrero de 2005 tras una feroz golpiza, un disparo, y una herida de arma blanca, durante una manifestación del gremio petrolero en la localidad de Las Heras. En esa oportunidad, el presidente envió un refuerzo de 250 hombres de Gendarmería para aplacar la rebelión sindical.
A partir del conflicto docente desatado en marzo de este año, se fueron sumando otros gremios estatales y hasta la propia policía provincial. El gobernador Carlos Sancho se vió desbordado por las manifestaciones y reclamos. Según la agencia local de noticias Opi, “algunos creen que el gobierno sabe que si en un hipotético caso manda a reprimir, la policía desoirá la orden”.
Igual que en los sucesos de Las Heras, el gobierno central volvió a enviar tropas de Gendarmería que, según fuentes locales, se encuentran supervisadas por el propio jefe de Estado Mayor del Ejército, general Roberto Bendini. El ministro del Interior, Anibal Fernandez, justificó la medida y declaró: "si esas cosas se van a producir, lo mejor es prevenir y no ir atrás de los conflictos", por lo que "la Gendarmería está en la provincia a pedido de su gobernador".
Aunque el presidente Kirchner sostenga que siempre apela a la convivencia y que prefiere "que la gente se pueda expresar", su provincia, Santa Cruz, se encuentra "militarizada", se hostiga a los manifestantes y no se permite el acceso de los docentes a las escuelas. El gobierno dispuso el descuento del presentismo y días de huelga a los docentes y empleados que pararon en marzo, y en un comunicado oficial emitido por televisión los comparó con “subversivos que quieren destruir la provincia”. Se registró además, un atentado con una bomba molotov contra el local donde los maestros realizaban un festival para recaudar dinero para el fondo de huelga.
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